Hum...
Hola a todos! Cómo ha ido el día?
Espero que bien, y que hayáis tenido tiempo para vosotros, y para
pensar en aquellas personas que necesitan que pensemos en ellas.
Estad seguros de que, aunque no las veáis, vuestro pensamiento les
llega y les acompaña.
Bien, siguiendo con la rutina a la que
os tengo acostumbrados, os cuento que esta mañana, tras el desayuno,
he tenido sesión de ejercicio físico. De momento, van a primar las
horas de trabajo físico sobre las horas de trabajo en pista. Las
competiciones, suponen un gasto importante de energía y demandan una
resistencia que es determinante a la hora de estar en las primeras
posiciones. Por ello, es importante cuidar el fondo físico y no sólo
la forma en que lanzamos y jugamos cada bola. La tensión, la
concentración, la toma de decisiones y el cúmulo de horas de un
campeonato, hacen mella en todo deportista; y estar preparado
físicamente, es tan importante como estarlo técnicamente.
Esta mañana, mientras hacía dichos
ejercicios, he visto una película llamada “fighter” (luchador).
Se trata de una película turca, creo, de una chica que quiere hacer
kung-fu en una escuela y lucha contra todos los ideales machistas de
una sociedad en la que las mujeres están relegadas a un segundo
plano y, donde la lucha, es algo impensable para ellas. Entrena duro,
se esfuerza, y lo hace a contracorriente, luchando contra el
veredicto y la opinión de todos los que le rodean. De vez en cuando,
van saliendo flashbacks de una lucha que tiene con un rival
encapuchado que es ella misma. Lucha que, al final de la película,
vence. Enfrentándose así a su miedo interior y venciéndolo. La
película transcurre con el típico combate final. Pero, a diferencia
de las películas americanas, el final no es el esperado, y pierde el
combate. Pero, en realidad, la película celebra que ella sí ha
vencido. Porque ha conseguido vencer sus miedos interiores, que son
los realmente importantes. Me encanta la escena final, donde, estando
en el podio, ella sonríe igualmente por lo que a nivel personal ha
alcanzado...
El resto de la mañana ha transcurrido
de forma tranquila. He estado en fisio de cháchara y mirando unas
cosas por internet. Me han pedido que participe en unas charlas y
necesito prepararlas un poco. A ver si el fin de semana me dedico a
ello...
Por la tarde, tras descansar un poco,
he continuado con las sesiones de ejercicio físico. Más
repeticiones, más series, más movimientos... así que no hay mucho
que contar. Me apetecía reírme un poco mientras lo hacía; así que
he visto una película antigua pero divertida llamada “mi primo
Vinny” que trata sobre un juicio.
Y entre la película y la visita de El
Maestro, ha pasado la tarde. A ver si el finde jugamos la partida que
tenemos pendiente... ahora, como siempre, me apetece tener mi espacio para mí, para leer, para escribir...
Y poco más. Como curiosidad, os cuento
que están haciendo un curso para los residentes en el CRE sobre la
forma de crear y mantener un blog; y, al parecer, les han puesto,
entre otros, el mío de ejemplo, por lo que ahora es seguido por
muchos de los residentes que no sabían que escribía todos los días,
y hoy ya me comentaban cosas acerca de lo que han ido leyendo.
Bien, espero veros de nuevo mañana.
Besos a todos!
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