viernes, 4 de mayo de 2012

...117...


Hum...

Hola a todos! Cómo ha ido el día? Espero que bien, y que una parte de él haya servido para que hayáis podido atender vuestros deseos. De no haber sido así, os invito a que sigáis buscando un momento al día para vosotros, para vuestras necesidades, y para observaros por dentro. Quizás haya carencias que no estén siendo atendidas. Y también pueda ser que tengáis demasiados deseos que alcanzar... sería bueno centrarse en uno solo, no?

Bien, hoy no hay mucho que contar. Por la mañana, nada más desayunar, me he ido a correos bien cargadito, como si fuera el camello de los reyes magos, a enviar una treintena de libros. El empleado, persona paciente y maja donde las haya, ha estado más de una hora conmigo para hacerlo todo de la forma correcta. Y eso que yo ya iba con los sobres escritos y con cada libro por separado.

Al regresar de correos, he pasado por el pasillo de administración que tiene el centro; y como todas las trabajadoras habían recibido ya su ejemplar, me han pedido que se los dedicase. Por lo que he andado un rato de despacho en despacho dedicando libros.

El resto de la mañana ha transcurrido con normalidad, gestionando asuntos del libro y de los entrenamientos. Y después de comer, me he ido a la clínica de fisioterapia a seguir con el tratamiento del brazo. Me ha tocado un fisio nuevo, con manos de cirujano, precisas y dulces a la vez, que me ha hecho un masaje que daba gusto. Y después unas corrientes. Genial!

Y poco más. He vuelto al centro y he estado dedicando libros a auxiliares y residentes. Mañana vuelve a ser mi sábado libre; por lo que no os escribiré. Así que nos vemos el domingo.

Buen finde a todos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario