Hum...
Hola a todos! Cómo ha ido el día?
Espero que bien, y que una parte de él haya servido para que hayáis
podido atender vuestros deseos. De no haber sido así, os invito a
que sigáis buscando un momento al día para vosotros, para vuestras
necesidades, y para observaros por dentro. Quizás haya carencias que
no estén siendo atendidas. Y también pueda ser que tengáis
demasiados deseos que alcanzar... sería bueno centrarse en uno solo,
no?
Bien, hoy no hay mucho que contar. Por
la mañana, nada más desayunar, me he ido a correos bien cargadito,
como si fuera el camello de los reyes magos, a enviar una treintena
de libros. El empleado, persona paciente y maja donde las haya, ha
estado más de una hora conmigo para hacerlo todo de la forma
correcta. Y eso que yo ya iba con los sobres escritos y con cada
libro por separado.
Al regresar de correos, he pasado por
el pasillo de administración que tiene el centro; y como todas las
trabajadoras habían recibido ya su ejemplar, me han pedido que se
los dedicase. Por lo que he andado un rato de despacho en despacho
dedicando libros.
El resto de la mañana ha transcurrido
con normalidad, gestionando asuntos del libro y de los
entrenamientos. Y después de comer, me he ido a la clínica de
fisioterapia a seguir con el tratamiento del brazo. Me ha tocado un
fisio nuevo, con manos de cirujano, precisas y dulces a la vez, que
me ha hecho un masaje que daba gusto. Y después unas corrientes.
Genial!
Y poco más. He vuelto al centro y he
estado dedicando libros a auxiliares y residentes. Mañana vuelve a
ser mi sábado libre; por lo que no os escribiré. Así que nos vemos
el domingo.
Buen finde a todos!
No hay comentarios:
Publicar un comentario