domingo, 1 de abril de 2012

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Tatiiii! Brumm!... ... Tatiiii! Burrubum!!

Cómo molan las procesiones de Semana Santa en León. Por algo son de interés turístico internacional. No son tan sobrias como las procesiones silenciosas de Zamora, por ejemplo, pero las vestimentas, la seriedad del público... uno no puede escapar de ese clímax misterioso y pasional, que abruma a propios y extraños. Nunca las vi enteras, nunca participé en ellas; pero, al margen de la Fe que uno pueda tener, son dignas de ver.

Hola a todos! Cómo ha ido el día? Espero que bien, y que hayáis disfrutado de un día estupendo, y de aquellos que, sin estar siempre presentes, hacen que nuestra vida sea rica y dichosa en los fugaces momentos en que hablamos con ellos. Y, si no lo habéis hecho, qué esperáis para llamarles?

Bien, os cuento que ayer tuve el día libre. Y como tal, aproveché para hacer cosas diferentes y no parar por el centro más que lo necesario. Salí a comer fuera, me compré un pantalón de niño pijo, llené la nevera... no hice nada del otro mundo; pero la verdad es que lo pasé bien. Hoy, en cambio, tocaba volver al trabajo. Así que me he levantado a la hora de siempre y he hecho la rutina de siempre en la medida de lo posible.

Tras desayunar y reposar un poco para darle tiempo al cuerpo a asimilar el alimento, me he puesto con “pedi”. Hemos visto el primero de los cuatro capítulos que nos quedan de moderm family. El de hoy, ha sido especialmente gracioso. Después, tras reponer líquidos y estirar un poco, me he puesto a hacer la maleta para la semana que viene. Es cierto que todavía faltan cuatro días; pero quería tener la ropa localizada, por si había que mandar algo a la lavandería antes. Y, como en el chiste, me he liao, me he liao... y he terminado guardando la ropa de más abrigo y sacando parte de la ropa de verano. Y es que estamos en esos días en que uno no sabe qué ponerse. Así que, cuando he bajado a comer, mi habitación era más bien un vertedero municipal sacudido por una bandada de rinocerontes, más que una habitación. He comido, y he subido a seguir con “el tema”. Y bueno, ya está todo plegadito y guardadito. Da gusto verla de nuevo... jejeje.

He descansado un poco y me he puesto con los ejercicios de brazos de la tarde. Os hablé de ellos hace mucho tiempo; pero como hay gente nueva leyendo el blog, os los cuento brevemente. Se tratan de ejercicios de los que hago seis series de diez repeticiones. Son movimientos de extensión, de rotación... en los que no sólo trabajan hombros, sino abdominales laterales, deltoides, antebrazos... es un poco más breve que el pedalier y menos intenso; pero mueves más partes del cuerpo.

Y poco más. El Maestro, su novia, la hermana, y otros dos chicos del grupo de boccia, se han marchado a casa por las fiestas de semana santa; así que esto está un poco desangelado y aburrido. Esta mañana en el comedor, dos residentes discutían por el fútbol de anoche... el robapanes ha vuelto a las andadas... así que todo va bien, jajaja!

Mañana os cuento más cosas.
Besos a todos!

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