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Hum...

Mis queridos amigos, cómo va todo? Qué tal ha ido el fin de semana? Espero que bien, que hayáis tenido tiempo en él para ver las cosas con optimismo, con alegría y con ilusión. A fin de cuentas, tal y como os decía el viernes, las cosas son hechos que están ahí; y que depende de nosotros ver si están medio llenas o medio vacías. La vida es rica en sí misma. Sobretodo, porque nos da la oportunidad, a cada instante, de poder cambiar los ojos con que la observamos. Os invito que os detengáis a escuchar vuestro interior. Si lo hacéis, quizás os deis cuenta de que ese estado es el que os hace ver la vida de una forma u otra. Y, por tanto, si cambiáis ese interior, cambiará vuestra existencia...

Bien, hoy estoy especialmente contento. No tengo mucho que contar. O más bien, sí que tengo, pero son cosas difíciles de expresar y que solamente, aquellos con los que comparto mi día a día ya sea en persona o por teléfono, podréis comprender. Y es que hoy cumplo 18 meses en el CRE. Un año y medio!! y parece que fue ayer cuando llegué con la furgoneta cargada hasta los topes de trastos y de mucha ilusión. No voy a rememorar viejos pasajes, ni hacer la reflexión que hago siempre de todo lo que esta experiencia está suponiendo a nivel personal y a nivel deportivo. Pero, desde luego, puedo decir que hubo Chema antes, y un Chema Después. Así que, de forma sencilla, os cuento que me siento muy alegre de seguir aquí un día más. Tengo tanto que agradecer... he aprendido tantas cosas de la gente...

En cuanto al fin de semana, os cuento que ha sido el campeonato de España de boccia por selecciones autonómicas en Ponferrada. Yo no participaba al no estar convocado por la selección madrileña. Este año, las selecciones estaban configuradas por un sistema de puntos, en el cual, los jugadores valían de 1 a 4 puntos en función de su experiencia deportiva. Y entre todos los jugadores, la suma no podía exceder de 11 puntos. Y claro, si me llevaban a mí, el resto de la cuenta se descuadraba bastante. Así que, tras hablar con la seleccionadora, optamos por dar entrada a jóvenes deportistas. Total, que aunque no competía, me acerqué a ver jugar a los chicos del CRE. Hubo de todo, sonrisas, lagrimas, nervios, despistes, sorpresas... hemos vuelto todos bastante cansados del campeonato; pero pienso que la experiencia ha valido la pena para aprender y para ser conscientes de las carencias que tiene cada uno. Me mordía las uñas viéndolos jugar, y la verdad es que he tenido mono de coger unas bolas y jugar con ellos. Aunque la mitad son más mayores que yo, para mí, seguirán siendo mis chicos...

Y poco más. Ayer tuve el día libre. Hoy, en cambio, he madrugado un poco para hacer los ejercicios de brazos antes de salir hacia Ponferrada para ver el campeonato. Y esta tarde, tras poner la habitación en orden, he hecho la sesión de pedaleo que tenía marcada en el plan de trabajo. Como ya no me quedaban episodios de moderm family, he estado viendo monólogos de Goyo Jiménez. Mientras pedaleaba y me partía de la risa, ha venido El Maestro a verme, pues decía que se me oía desde el pasillo. Así que, como podréis observar, he pasado una buena tarde.

Ahora, siento que mi espacio me reclama. Mi momento personal de silencio y de quietud. Tras un fin de semana intenso, de ver gente, de reencuentros, de partidos emocionantes, de desplazamientos y demás, toca detener el mundo para mimarme un poco.

Mañana, os cuento más cosas.

Besos a todos!