domingo, 19 de febrero de 2012

...192...

Hum...

Hola a todos! Qué tal ha ido el fin de semana? Espero que bien. Parece que ha hecho buen tiempo en todas partes; y eso, se nota mucho en el ánimo de la gente.

Hoy, tengo el día libre. Pero, como ayer no os escribí, aprovecho y os cuento un poco de ambos días. No es que haya mucho que contar; pero escribiros es una buena forma de pasar el rato. Intento no caer en la tentación de hacer la siesta, pues últimamente duermo mucho. Así que me ocupo en lo que puedo, jejeje.

Bien, os cuento que ayer tuve entrene de bolas por la mañana. Seguimos trabajando los ejercicios de precisión, y vamos incorporando nuevas cosas. Pero como forman parte de la preparación de Londres, no os las cuento, jajaja! Para los que me leéis desde el principio, os cuento que, esta semana, calculamos que llegarán las famosas bolas neozelandesas. Y qué ganas tenemos!!! ayer estuvimos entrenando con los tres juegos de bolas portuguesas que tengo; y os aseguro que, de las 39 bolas, no sacamos un juego de 13 bolas en condiciones. El fabricante me regaló un juego al regresar de Noruega y yo se lo agradezco. Pero, eso no quita que reconozca que siguen siendo malas bolas.

Tras el entrene y comer y descansar un poco, tuve sesión de pedaleo. Sesión que fue muy tranquila y muy amena, viendo la tele. El pedaleo de ayer, era el ejercicio final a una semana de trabajo constante. Y, el hecho de sentir que era el último esfuerzo, me dibujaba una sonrisa al ver que ha sido una buena semana de trabajo. Cada semana, tiene su pequeña recompensa. Y la de esta semana, ha sido, simplemente, ver que todo ha ido bien, y que mañana empieza una nueva semana que puede ser, como mínimo, igual de buena que esta.

Y poco más. Como os decía, hoy tengo el día libre. El Maestro está expectante con el partido Barça-Valencia de esta noche. Hemos salido antes a tomar algo, pues es el cumpleaños de su novia y nos ha invitado a “unos cacharros”. Supongo que esta tarde, seguiremos de tertulia hasta la hora de la cena y el partido...

¡Sencillez!

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