martes, 15 de noviembre de 2011

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Hum...

Hola a todos! Cómo ha ido el día? Aquí, tal y como dice la canción, llueve sobre mojado. Pero el aire, aunque frío, huele a limpio, a hojas de otoño que se salpican y oscurecen, que dejan de crujir al pisarlas, y que dejan de volar con el viento del otoño. Todo está mojado... pero mola. Lo único, es que volvemos a estar sin sol. Y parece que así sucederá durante unos cuantos días más. Mañana, último día para llevar el sobre del voto por correo, iré a correos a echarlo, pues pone que no se puede meter en un buzón convencional. Pero, con este tiempo, habrá que ir en coche.

Bien, respecto al día de hoy, os cuento que me he pasado casi toda la mañana en el fisio. Primero, me han dado un masaje. Tengo un pequeño dolor en la zona del antebrazo, que es constante. No es un dolor articular o de un tendón, cosa que es bueno. Y pensamos que se trata del ancóneo o el pronador redondo; músculos pequeñitos que ayudan en la flexión de codo (doblar el brazo) y que, ante mi ausencia de bíceps, uso más de la cuenta. Después, me han puesto corrientes en la zona. Y tras esperar un rato, hemos terminado la sesión con unos ultrasonidos. Mañana, seguiremos con ello para que no vaya a más.

El resto de la mañana, la he pasado tranquilamente leyendo. Poco a poco le voy cogiendo el gusto al libro, y me va costando menos leer en inglés. No es que haya mejorado mucho; pero soy consciente de que estoy mejor que cuando lo empecé. Así que, cuando lo termine, me plantearé comprar otro.

Y bueno, tras comer y descansar media horita, nos hemos ido al entrene. Echaba de menos días como hoy, con la pista llena de gente, todos tirando bolas, a un buen ritmo, sin parar... ha estado muy bien. Echaba de menos mis 9 metros, y hoy las cosas han salido bien a esa distancia. No sabemos nada del fabricante neozelandés al que le compraron las bolas en septiembre. Y no es que me preocupe; pero soy consciente de que mis actuales bolas no aguantarán otro año entero de trabajo. Espero que lleguen pronto. Hoy, han empezado a venir los chicos de prácticas de la universidad, estudiantes de Educación Física INEF. Al principio, se les ve un poco cortados, sin saber bien qué hacer o qué decir... supongo que llegar a un pabellón y encontrarse con 12 sillas, debe imponer un poco la primera vez. Pero hay que decir, ahora que todavía no me leen, que parecen muy majos.

La situación curiosa del día, que no quiero llamarla cómica, ha sido cuando, en mitad del entrenamiento, ha aparecido una chica trajeada en la pista con una chapita identificativa del Corte Inglés en la solapa, preguntando a los deportistas y técnicos si teníamos la tarjeta del corte inglés. Le han dicho que estábamos entrenando, y se ha esperado a que terminásemos. Después, mientras estirábamos al finalizar, se ha acercado en busca de nuevas presas. A primera vista, me ha parecido una falta de respeto enorme, pues considero mi entrenamiento como un trabajo más; y no me imagino a esta mujer interrumpiendo a un médico o a un mecánico, a mitad faena, para preguntarle si quiere dos horas de párking gratis. Pero, poniéndome en el lugar de la chica, me paraba a pensar a qué situación han llegado las empresas y los comerciales para tener que actuar de esa manera y con cualquier tipo de colectivos. No le he preguntado; pero imagino que, ya que se ha esperado y nos ha dicho que mañana volvería al centro, esta chica cobrará por las tarjetas que haga. Duro trabajo...

Y poco más. Tras comerme un potito tras el entrene y escribiros, me dispongo a descansar un poco antes de bajar a cenar. El Maestro, lleva desde ayer en la cama, con fiebre. Así que me pasaré a verlo, a ver cómo está.

Mañana os cuento. Besos a todos!

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