lunes, 8 de agosto de 2011

Día 296


Hum...

Hola a todos! Qué tal el lunes? Espero que bien. El mío, tal y como es la tónica de estos días, ha sido un no parar. Parece mentira que haya medio centro de vacaciones, porque el ajetreo dentro del edificio, sigue siendo el mismo. Aunque, en realidad, como yo ando puesto en mi faena, me da un poco igual que haya más o menos gente, jejeje.

Bien, os cuento que hoy he tenido sesión de bolas por la mañana y por la tarde. Apenas queda una semana para terminar de pulir las cosas y sacarle brillo a la maquinaria que los rivales encontrarán cuando vayan a Irlanda. Hoy ha sido día de observarse a sí mismo, de ver actitudes, pensamientos y de trabajar en pareja... más que día de hacer cosas propiamente técnicas.

Desde que me he levantado, no he parado hasta la hora de comer, de hacer cosas relacionadas con las competiciones de la semana que viene; así que no hay mucho que contar. El residente jovencillo ya se ha ocupado de proclamar a los cuatro vientos su romance con la deportista de slalom que hay en el centro. La verdad es que da gusto verlos, pues se les ve como a dos pajarillos todo el día juntitos en la misma rama. Hoy, en la calle, observaba a una pareja discutiendo. Supongo que al estar de vacaciones, la gente convive más horas y hay más roces, más altercados... y se pierde la hermosa perspectiva que da la oportunidad de estar más tiempo al lado de la persona que amas. Por otro lado, al no estar El Maestro, veré si estos días quiere jugar alguien al ajedrez, y así me distraigo un poco. Aunque, entre los entrenes y el fisio, poco tiempo libre me queda.

Y poco más. Espero que estéis bien. Mañana os vuelvo a escribir brevemente.

Besos a todos!

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