Día 86, regreso al CRE.

Hum...

Mis queridos amigos, aunque el siguiente día del diario, según el último correo que os envié, debería ser otro, he querido seguir con la numeración de los días desde que comenzó esta historia. Por eso, aunque ha pasado un tiempo, hoy es día 86.

Tras esta aclaración, HOLA!!!! me alegra mucho volver a veros. Ya tenía ganas de contaros cosas, de mantener el hábito del día a día... para los que no os lo dije en su momento, he creado un blog con las cosas que os voy contando en el diario. En él, podréis comentar aquello que queráis, de forma que otros puedan leerlo. Eso sí, recordad que los comentarios serán públicos y los podrá leer todo el mundo. Únicamente seguiré enviando el diario a aquellos que me lo habéis pedido; ya que a muchos se les saturaba la bandeja de entrada con tanto correo y con tanta foto.

Por cierto, os mando una foto de la habitación con un póster de vinilo que me regalo una persona a la que quiero mucho. Es un vinilo adhesivo con una foto mía del último Cto. de España de Boccia. Quizá no se vea bien, pero es enooorme. Se ve desde el pasillo, y al tener la puerta abierta, la gente lo ve y exclaman que les gusta.

Bien, os cuento que me he levantado y me he ido de rebajas, pues necesitaba unas cosas para la habitación. Aquí, todo vuelve a la normalidad. De los 22 grados en Valencia del viernes, he pasado de nuevo a los 3 grados lluviosos de León. Pero huele tan bien... esta mañana, hablando con la recepcionista, le decía que tenía ganas de volver, de ver a la gente... y me decía que eso es un signo inequívoco de que estoy bien aquí. Si no, el regreso se me habría hecho duro. Y no ha sido así. Anoche en la cena vi al Maestro, y nos alegramos un montón al vernos de nuevo. A ver si a la tarde charlo un poco con él... el centro todavía no está al 100%. Estamos los que llegamos el fin de semana, que se nos ve sonrientes por los reencuentros, y los que nunca se marcharon, que reflejan en sus caras que estos días han pasado sin pena ni gloria. -”Han sido dos semanas de no ver el sol”- me decía uno de ellos. Pero bueno, como si ya se supiesen el guión que os voy narrando, van ocupando sus papeles y roles. A falta de poskiwoman que todavía no ha regresado, he visto que hay un fichaje nuevo que, tras desayunar en la mesa de al lado, veo que promete mucho... jajaja!!

Y bueno, poco más. Al final, las compras no han podido ser, pues estaba todo cerrado. Se ve que la ciudad no tiene la imperiosa necesidad de comprar y vender como hay en Valencia. Todo vuelve a girar a un ritmo más lento, más pausado... la gente pasea y anda despreocupada. Así que, con este plan, dedicaré la tarde a descansar y terminar de preparar las cosas para mañana. Aunque a lo largo de los días que he estado en Valencia, he seguido haciendo ejercicio físico para no perder la forma, considero que es mañana cuando vuelvo de nuevo a la faena. Por cierto, que los Reyes Magos me traen un juego nuevo de bolas!! Quedan ocho meses para la copa del mundo, y todavía hay tiempo para hacer un buen trabajo de cara a esa cita. Supongo que, tras este primer periodo de dos meses, cambiaremos algo en la rutina de trabajo. Así que ya os cuento mañana.

Lo dicho, me alegro de veros. Un abrazo!