Día 104

Hum...

Hablaba anoche en la cena con Saturnino. Se acercó a mi mesa y comenzó a leerme su cuaderno de notas en voz alta mientras yo cenaba. En él, hacía una reflexión acerca de las plantas. Según Saturnino, las personas son menos avanzadas que las plantas porque, aunque tenemos la capacidad de hablar y ellas no, no somos capaces de entenderlas. Reflexionaba sobre el hecho de que, aunque las personas hablemos, no significa que seamos más inteligentes que el resto de seres vivos. Y, no sé cómo, aquella conversación derivó en el atleta Ben Johnson; fue un velocista famoso a principios de los 90. Consiguió bajar el récord de los 100 metros lisos por debajo de la barrera de los 10 segundos. Pero, al tiempo, se demostró que lo hizo gracias a sustancias dopantes, y perdió todos sus privilegios. Saturnino, tras contarme esa historia, me miró y me preguntó: -”¿Realmente vale la pena, por un segundo, perder tu dignidad?”- Y la verdad es que la pregunta me hizo pensar... ¿O es mejor llegar el último en la carrera y saber que has hecho las cosas bien?. Supongo que no todo es ganar, y que no todo es hacerlo a cualquier precio. Ya sea en el mundo de la competición o en el día a día con los demás. Me gustó hablar con él. Recuerdo que, mientras me contaba quién era Ben Johnson, vino una auxiliar y le dijo que no me diera la brasa que estaba cenando. Y le dije que no, que era una charla interesante, que no se preocupase. Y luego la auxiliar me preguntó intrigada si realmente había sido una charla interesante. Le dije que sí.

Hola chicos! Tras este breve recuerdo de anoche, os saludo a todos. Qué tal va ese jueves? Se acerca el final de la semana, el final del mes...

Hoy ha sido un día de pocas cosas que contar. Por la mañana, me he levantado con ganas de ir al fisio, de verle como cada Jueves, y que me descargara un poco los hombros y la espalda, que andan algo cargados del ejercicio de ayer. Pero, para mi sorpresa, se ha ido de vacaciones!! Así que mi gozo en un pozo. El otro fisio, me ha dicho que, si a lo largo de la mañana terminaba con sus pacientes, me avisaría por megafonía. Así que me he subido de nuevo a la habitación y he aprovechado para hacer papeles. Tenía que imprimir un documento, rellenarlo y escanearlo para mandarlo a la federación, junto con una foto carnet y el pasaporte escaneados. Todo para tramitar la licencia internacional de tiro de cara a una especie de copa del mundo de tiro que se celebra en Alicante todos los años en verano. Me dijeron que sería interesante que tuviese la licencia, y si tengo esos días libres, pudiese participar. Así que, por mí que no quede. Y bueno, en eso, y en esperar la llamada del fisio, se me ha ido la mañana.

Por la tarde, tocaba pista. Hoy, han tenido el detalle de ponernos la calefacción en el pabellón, pues hacía un frío de la leche. He entrenado a mi ritmo, a solas, en silencio... con tranquilidad... de cara al sábado que tengo jornada de liga. La primera del año! Qué ganas tengo! Y bueno, ha sido un buen entrene. Me he vuelto satisfecho al centro. Las bolas cambian mucho de estar calientes a estar frías. Así que tendré que plantearme no dejarlas en el pabellón y llevarlas y traerlas cada vez.

Y poco más. Ayer me decía una buena amiga que echa de menos a poskiwoman en el diario. Tendré que ir y atarle una rosquilla con un hilo y tirar de ella, a ver qué hace... o darle juego de alguna forma, jajaja!. Hoy andaba un poco indignada, pues la peluquera se ha torcido una muñeca y no podía cortarle el pelo a nadie. Y se ve que poskiwoman se había hecho a la idea de tener sesión de peluquería hoy... de hecho, va todas las semanas. Se le oía un leve -”peluqueraaaaa... ...tamadre...”- jajajaja!!! en fin...

Sigo con la búsqueda del pedalier. Sé que lo encontraré... lo sé. Ah! hoy ha nevado un poquito. Apenas una hora, pero ha sido un aviso de lo que viene el finde... mooOOoola! Ya os contaré mañana si nieva esta noche.

Un abrazo!!