Días 14 y 15

Hum...
hola a todos! han pasado dos días desde que os escribí, y parece que haya pasado una eternidad. El jueves vino la gente de la selección nacional de boccia, y estamos de concentración hasta el lunes. Estar de concentración, significa, entre otras cosas, cierto aislamiento. No porque estemos obligados a ello, sino porque, ya que viene el grupo, es momento de estar con unos y con otros, de saber de ellos, contarles, que te cuenten... y no queda mucho tiempo para hablar con la familia o escribir. Pero bueno, como esta costumbre me gusta, y a algunos de vosotros parece que también, aprovecho el momento de descanso para escribiros. Hoy, para los que no lo sabéis, es mi cumpleaños. Nací un jueves, hace 36 años... y aquí sigo, demostrando, sin la intención de hacerlo, que la vida es hermosa, que vale la pena aprovecharla y disfrutarla, y que nada es lo suficientemente importante para que pueda oscurecer nuestra existencia. Pero bueno, prefiero huir de este tipo de discursos. Que cada uno viva su vida como quiera, y que piense que está en su mano, si no mejorar, al menos tomársela de otro modo.
Estoy muy contento de todo lo que me está sucediendo aquí. Hoy, hablando un poco más del aspecto físico, os cuento que me siento muy bien. Ayer fue un entrene suave, aunque con sus bolas a todas las distancias. Por la tarde, me sentía como si apenas hubiese hecho nada. Al parecer, el trabajo de resistencia de las dos semanas anteriores, va dando sus pequeños frutos. Y es genial! eso no significa que haga más que antes, que sería un error. Significa que, de momento, haciendo lo mismo de antes, me canso menos. Sigo con el fisio, con los entrenes... me han traído el juego de bolas nuevo, y me he agobiado un poco, porque no conozco las bolas, no sé cómo ruedan, y no me hago a ellas. Pero bueno, apenas han pasado 48 horas y es comprensible. el anterior juego de bolas, lo compré en el 2007... y con solo verles el brillo, ya sabía cuál era cada una de ellas.
Por lo demás, todo bien. Al estar todo el día en el pabellón, no hay mucho que contar. He entendido que es pronto para hacer grandes amistades aquí, que todo lleva su tiempo, y voy disfrutando más de las pequeñas cosas... y voy dándome cuenta de pequeños detalles que me hacen ver que estoy saboreando mucho este lugar. Hoy, en el entrenamiento, después de lanzar la bola blanca a 8 metros, he cogido tres bolas, y las he ido lanzando con tranquilidad, con una calma que hacía mucho que no tenía, con los ojos cerrados, observando cómo se movía el hombro y el brazo, y al abrir los ojos, las cuatro bolas estaban juntas. Parece que voy teniendo una mente más clara, jejeje. Por otro lado, ayer hablaba con un amigo de la selección, que ve que aquí soy 100% independiente, y me hacía ver que, en Valencia, en una casa sencilla, con un par de adaptaciones, sería capaz de vivir solo.
Y poco más. Voy a ver si descanso un poco antes de retomar la faena. Como mañana volvemos a entrenar todo el día, os escribiré el lunes con calma, y os cuento sensaciones. Mientras tanto, os dejo con un mimo.
Muacs!