sábado, 23 de octubre de 2010

Día 8

Hum...
Hola a todos! siguiendo con la costumbre, aquí me tenéis un día más. Por lo que veo, algunos de vosotros seguís con interés este diario, así que, en la medida de lo posible, lo seguiré manteniendo. Os cuento que ayer continuamos con los ejercicios de resistencia. El pedalier me mira... yo lo miro a él... jajaja, pero nos vamos llevando bien. Ayer pudimos hacer 10 minutos más, sin llegar a fatigarme, cosa que me puso contento. Por la tarde, nos fuimos a jugar partidos de boccia, en plan más lúdico. Se vino un chico que no conocía. Se llama Alberto, y bueno, de chico tiene poco, porque es más bien enooorme. Es un crack, porque estás jugando, y no para de hablar ni aunque se lo digamos todos a la vez.... es como el conejito de duracell, pero en versión leonesa. La verdad es que me reí mucho con él. El resto del día, no dio mucho más de sí. Andaba algo cansado y me fui pronto a la cama. De hecho, como hoy es sábado y desayunamos un poco más tarde, a las 10, pude dormir un buen trecho. Y además, como hace taaaanto calor en la habitación, me pongo el pijama, me dejo caer en el colchón, y ni me tapo ni nada.... ayssss, qué gusto!
Hoy, tengo el día libre. Así que he optado por desconectar un poco del centro y me he ido en busca de la montaña. La conserje me hablaba de su pueblo, de un embalse... y me he ido hacia esa dirección. ha sido una gozada. He desconectado el cambio automático de la furgo y he hecho un recorrido por el paisaje, con una mano en el volante, la otra en el cambio, 3ª, 4ª, 3ª... el camino me ha llevado hasta una serie de pueblos de montaña, que me han recordado a mi añorada Rioja, con sus calles empedradas y manchadas de excrementos de vaca y caballos. De hecho, a mitad camino, he tenido que parar porque venían varios hombres a caballo acompañando un rebaño de vacas. Menuda carne debe salir de ahí... tan sanas... y bueno, hacían 8 grados, el sol hablaba sin parar... una gozada. Ahora he regresado para comer, dormiré un poco, y me acercaré al centro comercial a comprar cosas que me hacen falta. Pero vamos, que el día se intuye tranquilo.
Y poco más. Mañana os escribiré por la tarde, pues por la mañana voy a ver la galería de tiro. Ya os cuento. Hoy es un poco más breve, lo sé. Pero ya habrá más que contar... Os mando unas fotos de la excursión de esta mañana.
Os beso!

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